jueves, 4 de marzo de 2010

Cansada de las imágenes a las que había sido sometida, la vitrina se cambió el nombre: Caja de Texto es un término generalmente utilizado en diseño para alterar atributos como el color, el tamaño y el tipo de letra. A veces imaginaria, es el lugar en el que éstas condiciones acontecen. Dentro de todas las formas, el cambio de nombre no fue sólo una excusa para reemplazar textos por imágenes; la caja albergó a cinco artistas que—en este lapso temporal—no sólo editan si no que publican.
La caja de texto no es imaginaria: alguna vez se asemejó más a una vitrina, mostró siempre imágenes y siempre fue un depósito y un contenedor de luz, asignando a la luz la carencia de un mensaje. Por esta razón, la caja pidió a los cinco artistas que utilizaran la luz para producir sus textos y así editar y publicar en la caja, transmitiendo mensajes y siendo el testimonio de que la imagen y la palabra no están en categorías separadas.

www.cajasdetexto.com

martes, 2 de marzo de 2010

(...) y fue lo único que se me ocurrió meterle al bolsillo a Uribe antes que volviera, ese día saldría a las 3 Am de Bogotá, pero parchaba totalmente drogado en los talleres de la 64, yo casi no lo vi, ni compartí tiempo con él, depronto no como me hubiera gustado. Ese día nos encontramos varios en un bar-sitio llamado Matik-matik, decidimos caminar y atravesar lurdes a las 11 de la noche, nunca conté!, pero seguro seriamos más de 20 personas entrando a una singular taberna de chapinero, rezaba en su entrada "mi tierrita", y más fantástico aun!, poseía un feo perro disecado, justo en la entrada, acompañado de percheros llenos de sombreros de toda clase de lugares y contexos, todo el piso se mezclaba con un maluco anticuario lleno de cosas guardadas que dejaban claro el paso de varios años de chapinero, todo se trataba de un bar maluco pero con unas variables super buenas!. El resultado no era una ficción, porque yo entendí que el mesero tenia esmoquin y nos servia ron viejo de caldas al son de rancheras(...) fue un bonito final, pero claro!, después de todo esto, no se si Uribe aun tenia la chocolatina en el bolsillo–apropósito!– te mande una chocolatina.